Ser mujer es un camino que cada una de nosotras debemos recorrer por nuestra propia cuenta, descubriendo quiénes somos y qué queremos. Ese quién y ese qué, puede cambiar con la edad, es parte de crecer, de madurar como seres humanos. Pero lo importante, es que en cada momento de nuestra vida estemos conectadas con nuestro ser más profundo, para saber qué queremos y quiénes somos en ese momento. Eso nos llevará a ser fieles con nosotras mismas, y a no tomar decisiones de acuerdo a lo que los otros creen que debe hacer o ser la mujer, o de acuerdo a los patrones sociales que se van imponiendo, y que obligan a muchas mujeres a ser o hacer, lo que no quieren, por no ir contracorriente.
Nuestro camino tiene que ser fiel con lo que somos, con nuestras características propias de nuestro género. Un camino en el que no tengamos que mutilarnos, ni dejar de lado nuestra naruraleza femenina para poder encajar en el mundo. De esta manera, nos alejamos de nuestra feminidad, de nuestro propio ser, de nuestra esencia, de lo que nos hace ser mujer. Nos olvidamos de nosotras mismas.
El mundo tiene que abrirse a una visión realmente feminista, que tenga en cuenta las necesidades de las mujeres, que son muy diversas, para que podamos realizarnos plenamente.
Desafortunadamente la mujer de hoy, para poder encajar en el mundo, sigue sacrificando muchas cosas de su vida, inclusive las más esenciales, sin tener en cuenta sus necesidades.
La mujer, así como muchas veces en su hogar deja de lado sus necesidades por la pareja e hijos, olvidándose de ella misma, de igual manera lo hace muchas veces, en su vida pública, para encajar, para poder adaptarse al mundo. Esto no representa un verdadero cambio en favor de la mujer.
No se trata de que dejemos de ser quiénes somos, de lo que se trata es que descubramos quién es la mujer, qué queremos realmente, qué necesidades individuales y como colectivo tenemos, y que con esa visión, una visión realmente feminista, desde la mujer y para la mujer, nos abramos espacio en la sociedad, sin olvidar que el mundo de las mujeres es diverso. Y que todas las mujeres somos distintas.
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